Aunque parece que se va a cumplir de nuevo y a rajatabla el dicho de que “hasta el 40 de mayo…” y que las lluvias y las inclemencias meteorológicas nos van a acompañar hasta bien entrado el mes de junio, hay que ir preparando las terrazas para cuando llegue el buen tiempo y el calor, porque seguro que aparece de un día para otro.
Desde que pasamos el covid-19, las terrazas se han convertido en un bien muy preciado, hasta el punto de que las viviendas que disponen de ella -incluso las que sólo tienen un pequeño balcón-, se cotizan al alza y se valoran mucho más que las que no lo tienen, en un mismo edificio.
En muchos casos, han pasado de ser lo que antes eran lugares de almacenamiento de objetos de poco uso o de gran tamaño que no sabíamos dónde colocar, como las bicis, a ser los lugares más cuidados y apreciados de las viviendas.
Para los afortunados que disponen de este espacio exterior, es tiempo ya de renovarlo o prepararlo para lograr un lugar especial y acogedor, que invite a sentarse a leer, a tomarse un té, a conversar, a tomar algo con los amigos… o simplemente a no pensar en nada y relajarse. Y conseguir tener una terraza o espacio exterior con estilo y con encanto no es tan difícil. Aquí van algunos consejos para conseguirlo:
Plantas y flores
Las plantas y las flores son elementos naturales que aportan vida, alegría y color a cualquier espacio. Tanto las naturales como las artificiales (cada día más logradas) brindarán también un toque más exótico a tu terraza o balcón. Puedes colocar macetas con plantas de diferentes tamaños y variedades para crear un ambiente fresco y acogedor. O ponerlas dentro de cestas, también de diferente tamaño y color.
- En lo que se refiere a las artificiales, que están tan de moda, quedan especialmente bien los ficus, el bambú, las bananeras, la monstera, las palmeras… Las hay de multitud de tamaños, pero para que tengan envergadura, mejor que tengan a partir de 80 cms en adelante.
- Si son naturales dan un toque muy especial y requieren pocos cuidados los cactus y las plantas ‘crasas o suculentas’, como la echeveria o la sansevieria (también llamada ‘lengua de suegra’), que almacenan el agua en sus hojas gruesas.
- Las guirnaldas de hojas y plantas colgantes, ya sean naturales o artificiales, también están de moda y añaden calidez y color a los espacios. Puedes colocarlos sueltos en una pared a modo de adorno, o rodeando las aristas de un mueble, o para endulzar el metal de algún sofá o butaca de hierro, o en una barandilla, etc.
Auge de los materiales naturales
Como la rafia, el mimbre, el yute, el ratán, la madera… Tanto para los muebles -sofás, mesas, sillas, butacas, pufs…-, como para los elementos decorativos, como cestas, bandejas o lámparas. Estos elementos aportan una sensación de calidez y naturalidad a cualquier ambiente y aún más en los ambientes exteriores.
- Elige muebles de exterior que se adapten al estilo que deseas lograr en tu terraza. Ya sea moderno, rústico, bohemio o minimalista, asegúrate de que los muebles y accesorios se complementen entre sí y con el espacio.
- Para aquellos ambientes húmedos o fríos, una buena opción, sobre todo para el mobiliario para exterior, es el ratán sintético. Estéticamente también queda cálido a la vista y apenas necesita mantenimiento, es muy resistente, lavable con agua, resistente a la climatología, suele estar disponible en varios tonos, es ecológico (es ecológico) y más económico que el ratán natural.
Cojines y textiles
Agrega cojines y textiles a tus muebles de exterior para crear una sensación de comodidad y calidez. Elige colores y patrones que complementen la paleta de colores de tu terraza.
- No obstante, se llevan los tonos naturales y neutros para dar calidez, los blancos, las gamas de los beiges, crudos, grises, los trigo… y siempre se les puede meter algún contraste o nota de color.
- Este año se llevan mucho los motivos vegetales y geométricos y puede seleccionarse alguno en cojines, por ejemplo, para dar esa nota alegre con la base de los neutros y naturales.
Iluminación ambiental
La iluminación adecuada puede transformar por completo el ambiente de una terraza. Considera utilizar luces colgantes, faroles, velas o guirnaldas de luces para crear un ambiente cálido y acogedor durante las noches. Y si puedes colgar lámparas de techo, seguro que ya sabes lo mucho que se llevan las lámparas de rafia, ratán, bambú y mimbre.
- Para no tener que estar pendiente de encender velas y velones y evitar posibles peligros, una buenísima opción es comprar velas artificiales que funcionan con pilas y quedan muy bien dentro de los faroles, o luces y guirnaldas solares, que se encienden con el ritmo de la carga de sol y la llegada de la noche.
Alfombras y revestimientos de suelo
Poner una alfombra o un revestimiento de suelo puede hacer que tu terraza parezca más acogedora y cálida. Elige siempre un color claro en la gama de los beige, cremas, tabaco o gris claro, que dé luz y calidez.
- Aunque las alfombras de fibras materiales están de moda y quedan fenomenal, también son menos resistentes sobre todo a las lluvias y a los climas más fríos, por lo que te recomiendo los materiales sintéticos, que quedan francamente bien y también son muy ecológicos, como las alfombras hechas con PET (ereftalato de polietileno); son materiales más resistentes a la intemperie y muy fáciles de limpiar con agua y jabón, no absorben sustancias líquidas, lo que permite poder tener una alfombra duradera en el tiempo. Es un tipo de alfombra ideal también cuando tienes mascotas o niños en casa.
Otros complementos decorativos
Además de todo lo mencionado, cada vez colocamos más elementos decorativos en las terrazas y espacios exteriores, sobre todo para decorar las paredes y conseguir darle un toque final.
- Hay quien opta por darle un toque temático, por ejemplo, con objetos marineros si le gusta mucho la náutica, o con objetos étnicos.
- Pero los hay más ‘transversales’ que buscan un toque acogedor, como pueden ser los espejos de rafia o ratán o mimbre…
Otro complemento decorativo que puede ser interesante es instalar algún elemento de agua, como una fuente, si se tiene espacio, o un pequeño estanque o una cascada. Estos elementos no solo añaden belleza visual, sino que también pueden proporcionar un sonido relajante.
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